En el concello pontevedrés de Moraña, el último domingo de Julio tiene lugar la tradicional Festa do Carneiro ó Espeto (Fiesta del Cordero al Gancho) donde grandes grupos de amigos degustan los tradicionales carneros en la Carballeira de Santa Lucía.
Aquí se asan al estilo pampero (abiertos en canal y con fuego de leña), cerca de doscientos carneros.
No se venden raciones, sino carneros enteros, por lo que es una fiesta gastronómica en la que participan grandes grupos de amigos, previa reserva de mesa (20-30 personas) y lote de comida (un carnero, dos empanadas de zorza y bacalao, pan, un garrafón de vino del país y café).
Pero nadie queda sin degustar la sabrosa carne, ya que todos los restaurantes del municipio la preparan esos días en previsión del numeroso público que se acerca a la fiesta.
Mientras esperan por el asado, que necesita unas siete horas para estar a punto, los comensales abren el apetito con las empanadas y el vino. Las peñas, reconocibles por sus llamativas camisetas, animan la comida con sus charangas y todo el mundo acaba contagiado del espíritu lúdico de esta gran bacanal.
El origen de esta fiesta se remonta a los años 20 del pasado siglo, cuando un morañés jubilado en Argentina prepara varias comidas campestres a orillas del rio Umia, en las que se asaba el cordero al estilo pampero. Tal trascendencia tuvo esta manera de prepararlo, que se extendió como práctica habitual en las distintas celebraciones de los morañeses.
Pasados los años, en 1969, por iniciativa de un grupo de jóvenes y el entonces alcalde la villa, se consagró como una de las fiestas más importantes del pueblo.
Moraña vive unos intensos días de fiesta, con un programa cargado de actividades culturales y deportivas con cine en la calle, concursos de monólogos, festival folclórico, teatro, conciertos y verbenas. En el aspecto deportivo cabe destacar la exhibición de patinaje, triatlón, fútbol sala, volea y baloncesto. Los más pequeños tienen su espacio con el “Día do Neno” y a destacar también la famosa prueba “En busca do carneiro perdido”.
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